Al filo de la navaja

Al filo de la navaja
Nuestro pasado no determina nuestro futuro, son nuestras decisiones y nuestras acciones las que lo hacen. Así como tampoco somos responsables por lo que nuestros antepasados hayan hecho o pretendido hacer de nosotros, pero sí lo somos de lo que decidamos hacer con ello. El pasado es un hecho, el presente lo construimos segundo a segundo, y el futuro es un lugar incierto que siempre nos mantendrá… Al Filo de la Navaja

martes, 22 de julio de 2014

Cap. 52 Los problemas de Evan Turel…



La noticia de que Jason estaba vivo tardó en conocerse lo que el mortífago demoró en llegar a la oficina de Turel. Inmediatamente por un lado era girada la orden de captura contra Jason y por el otro todos los miembros de la familia Weasley fueron detenidos.

Arthur estaba entregando unos pergaminos en la oficina del Ministro cuando dos agentes del CCP se le acercaron y sin ninguna explicación se lo llevaron delante de los estupefactos trabajadores. Percy al igual que su padre estaba en su oficina y lo sacaron de allí sin explicación alguna. Los gemelos fueron sacados sin ceremonias  ante los asombrados clientes de su establecimiento, por media docena de agentes.  Molly y Fleur estaban en La Madriguera, cuando irrumpió en la casa un destacamento de agentes y mientras unos se las llevaban, los otros hicieron un registro exhaustivo de toda la propiedad.

Ginny estaba en clase de Transformaciones cuando Amycus abrió violentamente la puerta y venía en compañía de Snape y de otros dos individuos.

-         ¿Qué significa esto?  --  preguntó la profesora

-         La señorita Weasley debe acompañar a estos caballeros  --  dijo Snape

-         ¿Por qué y a dónde?  --  volvió a preguntar Minerva

-         Eso no es asunto tuyo  --  dijo Amycus con una sonrisa de satisfacción  --  Son órdenes ministeriales y eso no lo puedes discutir.

De modo que Ginny se levantó de su asiento y se puso en marcha.

Con Bill tuvieron más dificultad, porque no lo encontraron cuando fueron a buscarlo a Gringotts y los duendes negaron saber nada de él. Desde que el Banco había pasado al control de los mortífagos los duendes se limitaban a hacer su trabajo pero evitaban toda comunicación con los magos. Sin embargo, Turel tomó aquello como que Bill se estaba escondiendo y giró una orden de captura también en su contra.

Apenas Jason les había informado de lo sucedido, Bill había enviado aviso a todos los miembros de su familia diciéndoles exactamente lo que debían decir, pero aunque era fácil deducir que serían interrogados, no se imaginó que serían detenidos. En el caso de Ginny, el mensaje lo envió a través de la profesora McGonagall y en cuanto fue sacada de clases ella le envió a su vez un mensaje a Bill notificándoselo.

Ginny fue conducida de nuevo a una celda en las mazmorras y dos agentes del CCP se quedaron en la puerta. No obstante, no tuvo que esperar mucho, porque al poco rato la puerta se abrió dando paso a Evan que venía en compañía de Snape y otro sujeto.

-         Nos volvemos a ver señorita Weasley 

-         Y está muy lejos de ser un placer  --  le dijo ella

-         ¡Déjenme solo con ella!

-         No puedo hacer eso  --  dijo Snape

-         ¿Qué?

-         Me escuchaste bien Evan.

-         ¿Sabes a lo que te arriesgas al desobedecerme?

-         ¿Sabes a lo que te arriesgas tú, si el señor Tenebroso sabe que por tu estúpida venganza personal le haces algo a un alumno de esta escuela?  --  preguntó Snape con voz helada

-         ¿Cómo te atreves?

-         Debes tener alguna habilidad o mi señor no te tendría trabajando para él  --  le dijo Snape  --  pero para mí, sigues siendo el mismo niño estúpido y con exceso de arrogancia que no difiere en mucho de aquel al que persigues, pero mientras yo sea el director de este maldito colegio y en tanto no reciba una orden directa del señor Tenebroso, cualquier cosa que hagas aquí será en mi presencia.

-         Cuidado Severus Snape  --  dijo Turel con voz venenosa  --  podría pensar que estas protegiendo a estos traidores a la sangre.

-         Me trae sin cuidado lo que tú puedas pensar, así como me importa muy poco la suerte de ellos, pero respondo por los alumnos de este colegio ante el señor Tenebroso y a diferencia de ti, yo sí tengo claras mis prioridades.

Ginny asistió con asombro a aquel insólito pleito, pero vio que el individuo que acompañaba a Turel se había ido moviendo sigilosamente en dirección a Snape y sin que éste se diese cuenta o al menos eso pensaba ella, porque de pronto Snape movió su varita con tanta rapidez que ella apenas si lo notó y el sujeto fue lanzado contra la pared.

-         Tienes mucho que aprender Turel  --  le dijo a Evan con una sonrisa sardónica  --  Y ahora termina con lo que viniste a hacer, porque yo tengo cosas más importantes en las qué ocuparme y ninguna incluye perder mi tiempo en tu infantil venganza.

Turel estaba que reventaba de furia pero no le quedó más remedio que volverse hacia Ginny, ya tendría ocasión de cobrarle a Snape aquello.

-         ¿Dónde está Prewet? 

Hizo la pregunta aun a sabiendas de que sería perfectamente inútil, recordaba su anterior “conversación” con aquella estúpida traidora y sabía que era tan terca como todos los desgraciados miembros de su familia. No había planeado hacerlo de aquella forma, pero con Snape allí se veía impedido de actuar como tenía previsto y para aumentar su furia, Ginny soltó una carcajada.

-         De veras hay que ser muy imbécil y mira que he conocido a varios, pero tú te llevas el premio  --  le dijo

-         Escúchame niña…

-         No, escúchame tú a mí, idiota. Eres tan incompetente que intentaste matarlo y no lo lograste, fuiste tú quien lo dejó escapar, así que búscalo. Pero en beneficio de tu salud te sugeriría no encontrarlo, porque si eso sucede ya puedes irte despidiendo de tu miserable vida.

-         Si no me lo dices tú, creo que pasaré un “agradable” rato con tu madre, y si no lo soporta, entonces veremos tu linda cuñada  --  le dijo con malignidad  --  Así que si quieres seguir teniendo madre, será mejor que me lo digas por las buenas  --  pero en definitiva aquel sujeto intentaba morder más de lo que podía tragar

-         Ni aunque lo supiera te lo diría, ni por las buenas ni por las malas y eso ya deberías saberlo, porque ya tuviste el placer de torturarme una vez  --  le dijo con tranquilidad  --  Y si se te ocurre la estúpida idea, cosa que no me extrañaría porque eres estúpido, de hacerle algo a mi madre o a mi cuñada, es mejor que nos mates a todos de una vez, porque no habrá lugar en la tierra donde estés a salvo

-         ¡Lo voy a encontrar y lo haré pedazos!  --  el gritó con rabia, pero para su mayor indignación ella volvió a reír

-         Lo dudo,  ya quedó demostrado que Jason te queda demasiado grande. De modo que prepárate a morir, bastardo  --  hasta ahí le llegó la paciencia a Evan

-         ¡CRUCCIO!  --  lanzó con violencia pero su varita salió despedida de su mano unos segundos después

-         ¡Ya basta!  --  lo interrumpió Snape  --  Es obvio que no te dirá lo que quieres saber, es tan estúpida y arrogante como todos sus parientes,  y a menos que quieras que el señor Tenebroso se entere en detalle de tu incompetencia, sal de aquí ahora mismo

-         ¿Te atreves a amenazarme?

-         No es una amenaza, es la consecuencia directa de tus actos.  Ya me has hecho perder mucho tiempo, así que ¡Largo!

Ginny sonrió satisfecha, no le importaban los motivos de Snape pero si todo lo que ella había dicho a consciencia servía para que Voldemort le tuviese mala voluntad a aquel sujeto, se daba por bien servida.


Bill se había aparecido en el Callejón Diagon,  se dirigía al Banco cuando le llegaron dos patronus casi al mismo tiempo. Uno de McGonagall donde le avisaba que Ginny había sido sacada de clases por los agentes del CCP, y el otro de Tonks avisándole que todos los Weasley habían sido detenidos y que se había librado una orden de captura en su contra. De modo que tomó una decisión rápida, volvió sobre sus pasos y entró al Caldero Chorreante que a aquella hora estaba a reventar.

-         Señor Weasley  --  lo saludó Tom  -- ¿Una mesa?

-         No Tom gracias, estoy de paso. Debo presentarme en el Ministerio porque todos los miembros de mi familia han sido detenidos  --  dijo esto lo suficientemente alto como para ser perfectamente escuchado por los que estaban allí

Varias voces se elevaron con indignación, algunos quisieron hacer preguntas y otros se ofrecieron a acompañarlo pero Bill declinó el ofrecimiento y se disculpó por no poder responder a sus preguntas diciendo que todo lo que sabía era que habían sido detenidos con el objetivo de averiguar el paradero de su primo. Aquello fue como soltar una bomba de tiempo en medio del lugar. Para empezar, la comunidad aún estaba indignada con la “muerte” de Jason, y ahora con aquella sorprendente noticia lo único que había hecho Bill era asegurarse de que todos estuviesen enterados de lo que estaba sucediendo. Y para su buena fortuna, al menos en aquel momento, un periodista de El Profeta estaba presente.

Después de ello y aun en contra de lo que les había dicho, varios magos y brujas lo acompañaron al Ministerio. Una vez a las puertas, fueron interrogados acerca de su presencia allí.

-         Mi nombre es William Arthur Weasley y vengo porque según entiendo hay una orden de captura en mi contra  --  dijo al guardia  --  Así que vengo por mi propia voluntad a informarme de las razones para ello.

La algarabía de los magos que lo acompañaban y de la gente que comenzaba a agolparse en la entrada, hizo que los guardias tomaran la rápida decisión de dejarlo pasar, mientras que los demás le aseguraron que no se moverían de allí hasta que él mismo no saliese y les informase lo que estaba sucediendo. Bill les agradeció y entró con una sonrisa en los labios, Turel la tendría muy difícil ahora porque para dentro una hora a lo sumo, media comunidad estaría pidiendo explicaciones,  ya que si bien era cierto que Voldemort había infiltrado el Ministerio hasta sus raíces y había sembrado la duda en la gente con respecto a Harry, no era menos cierto que aún quedaban muchos magos y  brujas honestos que constituían la mayoría, y siendo que él seguía actuando con discreción en algunos aspectos, no le convenía para nada que se desatara una revuelta pública reclamando por el paradero de una de las familias más antiguas y conocidas del mundo mágico.

Como evidentemente Turel no se esperaba que Bill se presentase en el Ministerio, no había girado ninguna instrucción al respecto, razón por la cual los guardias no sabían a ciencia cierta qué hacer con él. De modo que lo condujeron directamente al Departamento de Aurores donde ahora funcionaba el CCP también. El asunto fue que allí tampoco sabían qué hacer y luego de casi una hora de ir y venir, decidieron reunirlo con el resto de la familia.

Cuando se abrieron las puertas del ascensor, un individuo alto y con una cicatriz en la frente a quien Bill reconoció como André Kovacevic uno de los más cercanos a Turel, abrió mucho los ojos.

-         ¡Weasley!

-         Kovacevic  --  dijo él a modo de supuesto saludo

-         Así que te atraparon, eso sí que fue rápido  --  dijo con evidente júbilo

-         No exactamente, escuché que tu jefe me buscaba y he tenido la amabilidad de venir a ver qué se le ofrece  --  dijo en tono pausado pero no carente de burla, lo que enfureció al otro

Salieron del ascensor y caminaron de prisa por los pasillos casi desiertos del Departamento de Misterios, bajaron las escaleras que conducían a las salas del Tribunal y siguieron caminando hasta llegar a un salón adyacente a la sala principal del Tribunal. Kovacevic abrió la puerta y Bill entró.

Allí se encontraban sus padres, sus hermanos y su esposa, pero con una sola mirada él detuvo cualquier cosa que quisiesen decir.

-         Evan va a alegrarse mucho  --  dijo Kovacevic con una sonrisa torcida

-         Lo dudo  --  lo contradijo Bill  --  y en todo caso, te aseguro que la alegría no sería mutua.

Obviamente aquel sujeto era de procesos de pensamiento extraordinariamente lentos y cuando finalmente pareció entender, no pudo decir nada porque la puerta se abrió dando paso a  Evan. Fue evidente para todos que su cara reflejaba muchas cosas y ninguna de ellas era alegría precisamente. Algo que era por demás lógico, ya que venía de su frustrante entrevista con Ginny.

-         ¡Vaya!  --  exclamó al ver a Bill  --  Me alegra que al menos mis hombres se hayan movido rápido.

-         Yo en tu lugar no me alegraría tanto  --  le dijo él  --  porque si estoy aquí es porque decidí venir, así que no debes mi presencia a tus “soldaditos”

-         Eso es lo que tú dices  --  replicó Evan furioso  --  pero difícilmente alguien te creerá esa historia cuando pesa sobre ti una orden de captura.

-         Lo digo yo y más de una docena de personas que están a las puertas del Ministerio esperando la explicación de por qué toda mi familia ha sido detenida.

Evan abrió mucho los ojos y quizá de no haberse encontrado en el estado de furia en el que se encontraba, habría tenido el buen juicio de detenerse a analizar las posibles implicaciones de aquella información, pero en lugar de ello se volvió hacia todos los allí reunidos.

-         Quiero saber dónde está Jason Prewet y quiero saberlo ya, o les aseguro que ninguno de ustedes volverá a ver la luz del sol.

Sin embargo, todo lo que recibió como respuesta fue un frío silencio, y mientras Evan consideraba los distintos cursos de acción, se abrió la puerta y vieron que varios agentes del CCP traían a Charlie. Sin embargo, no tuvo tiempo de decir ni de hacer nada, porque detrás de ellos venía Mark Albright, el jefe del Wizengamot y varios miembros más del Tribunal. Este era un hombre de aspecto severo, de cabellos y barba blancos y penetrantes ojos café, y hasta donde sabían, un viejo amigo de Dumbledore al que los mortífagos no podrían manejar fácilmente.

-         ¿Qué significa esto Turel?

-         No es asunto suyo Albright  --  dijo Evan con los dientes apretados

-         Sí utilizas una “mis” salas, es mi asunto  --  dijo mirándolo con desagrado  --  No sé hasta dónde lleguen tus atribuciones pero te aseguro que pienso averiguarlo, y mientras no se dictamine otra cosa, tengo perfecto derecho a saber con qué fin estás utilizando esta sala.

-         Escuche anciano, estoy en medio de una importante investigación relacionada con la captura de un fugitivo, de modo que…

-         Y puedo saber  --  lo interrumpió Albright  --  ¿Por qué razón no utilizas tus propias salas de interrogatorio?

Pero Turel estaba más allá de la simple ira, ese día todo le había salido mal y ahora este “trasto viejo” quería fastidiarlo también.

-         ¿Y qué tiene que ver una familia como los Weasley en la captura de un fugitivo?

-         Si me permites Mark  --  dijo Arthur  --  es algo que a nosotros también nos gustaría saber.

-         ¿Turel?

-         ¡Son parientes de Jason Prewet!  --  escupió con rabia y Albright lo miró con extrañeza

-         ¿Y?  ¿Es que el CCP ahora se dedica a perseguir muertos?

-         Jason está vivo señor Albright  --  dijo Bill y agregó en forma aparentemente inocente  --  Verá, Turel creyó que lo había matado pero no fue así, de…

-         ¿¿Cómo??  --  pregunto Albright y una expresión ahogada salió de las gargantas de los demás miembros del tribunal que lo acompañaban

Evan se volvió hacia Bill con la varita en la mano y apuntando a su pecho.

-         ¡Cierra la boca Weasley!

-         ¿Por qué?  --  preguntó Bill  --  Estaba en la creencia de que estabas tan orgulloso de tu trabajo que te habrías encargado de que todo el mundo supiese cómo habías torturado a mi primo hasta creerlo muerto, a mí, a mi esposa y a mi hermana de solo ¡dieciséis años!  --  finalizó varios decibeles por encima de como había comenzado

-         ¡DEPELLO!  --  el rayo dio en el pecho de Bill y éste salió despedido chocando contra la pared

-         ¡Turel!  --  bramó Albright apuntándolo a su vez con su varita  --  ¿Qué locura es esta?

-         ¿Y de qué con exactitud, se acusa al sanador Prewet?  --  preguntó una de las brujas que acompañaba a Albright

-         Supongo que de estar vivo  --  dijo Fred  --  ya que no pudo matarlo antes, debe pretender hacerlo ahora

-         Porque si vienes con lo mismo de querer saber dónde está Harry, pierdes tu tiempo miserablemente --  agregó George

Charlie y otro de los miembros del Tribunal habían ayudado a Bill a ponerse de pie y ahora el mayor de los Weasley se acercaba a Turel.

-         Ya te lo dije una vez y te lo repito ahora, tendrás que matarnos a todos  --  le dijo  --  porque como debes recordar, el torturarnos no te sirvió de nada. Casi matas a Jason intentando que te dijera algo que no sabía, de modo que si crees que alguno de nosotros te dirá dónde está, francamente estás más loco de lo que creía.

-         Te voy a enviar a Azkaban Weasley  --  dijo Evan volviéndose hacia Arthur

-         ¿Y bajo qué cargos?

-         Nos mentiste, nos dijiste que tu hijo estaba enfermo en casa y no es así  --  dijo con una sonrisa torcida  --  Debería estar en la escuela y tampoco está allí. De modo que sabiendo como sabemos todos, que es amigo de Harry Potter, entonces tiene que estar con él.

-         Vamos por partes  --  dijo Charlie  --  En primer lugar mentir acerca del paradero de un hijo, que yo sepa no está tipificado como delito en nuestras leyes.

-         ¡Cállate Weasley, no es tu asunto!

-         ¡Si amenazas a mi padre o a cualquier miembro de mi familia con enviarlo a Azkaban, es mi asunto!  --  dijo Charlie en tono amenazante

-         Y el chico tiene razón  --  dijo Albright

-         Pero según la nueva normativa, todos los magos tienen la obligación de enviar a sus hijos al colegio y eso sí está penado  --  alegó Turel

-         Ese era mi segundo punto  --  dijo Charlie  --  Mi padre no ha transgredido ninguna norma, porque si te fijas bien, mi hermana menor fue enviada al colegio, pero Ronald ya es mayor de edad, por lo tanto y por definición, ya no está bajo la tutela de nuestros padres, de modo que no hay delito tampoco.

-         ¡Entonces enviaré a tu hermano!  --  dijo Evan con furia

-         Claro, para lo cual tienes que encontrarlo primero  --  dijo Fred

-         Y con la competencia que has demostrado, pues francamente suerte con eso  --  agregó George en tono burlón

-         ¡Todos ustedes son unos malditos traidores y me aseguraré de que paguen por ello!  --  gritó Evan con exasperación y comenzó a caminar hacia la puerta

-         ¿Significa eso que podemos marcharnos?  --  preguntó Bill

Pero él no contestó y salió dando un portazo.

-         Será mejor que salgan de aquí  --  dijo Albright  --  nosotros los ayudaremos

-         No  --  dijo Bill  --  no vamos a darle un motivo real y válido para perseguirnos, nos quedaremos aquí hasta que el mismo infeliz nos diga que podemos marcharnos.

-         Pero podría cumplir su amenaza  --  dijo una bruja bajita y con aspecto enfermizo

-         Eso no resultará tan sencillo tampoco  --  dijo Albright  --  antes de venir para acá envié al resto de nosotros en los que aún podemos confiar, para que corrieran la voz de que tenían a toda la familia retenida aquí.

-         ¿Y cómo se enteraron?  --  quiso saber Arthur

-         Kingsley me avisó a mí, pero ya Nymphadora había dado aviso también, al igual que Dánaee Aldridge. De modo que imagino que a estas alturas, ya lo sabe una buena cantidad de gente.

Apenas Evan salió de la sala, uno de sus hombres venía corriendo por el pasillo.

-         Señor, el Ministro quiere verlo ahora mismo.

Él maldijo por lo bajo pero no le quedó más alternativa que dirigirse al despacho del ministro y no fue muy bien recibido.

-         ¿Me puedes explicar qué está sucediendo?

-         ¿Por qué señor?

-         ¿Cómo que por qué? Hay un tumulto en la entrada del Ministerio y todos preguntan por los Weasley. Me llegó una lechuza de El Profeta pidiendo información acerca de la insólita “resurrección” de Jason Prewet y por último una de Severus Snape, diciéndome que  no lo hiciera perder el tiempo con infructuosos interrogatorios a los alumnos  --  hizo una pausa y lo miro con desagrado  --  ¿Aún me seguirás preguntando, “por qué”?

Evan no tuvo otra salida más que explicarle al ministro todo lo que había sucedido y por último agregó que estaba seguro que los Weasley sabían el paradero no solo de Potter, sino de Granger, Lupin, Black y por supuesto de Jason.

-         Déjame ver si entendí  --  dijo Thirknese mirándolo con incredulidad  --  Primero  --  y comenzó a enumerar con los dedos  --  Casi matas a Prewet y ni siquiera te aseguras de haberlo hecho. Segundo, tuviste a Lupin y lo dejaste escapar al igual que a su hija. Tercero, torturaste a varios miembros de una familia que por muy traidores que sean, son miembros respetados de esta maldita sociedad y casi en presencia de un centenar de testigos. Y cuarto, haces presos a esos mismos individuos a la vista de todos sabiendo que el señor Tenebroso quiere discreción  --  casi con parsimonia se levantó de la silla y a continuación dio un sonoro manotazo sobre el escritorio  --  ¡Eres un imbécil!  --  le gritó  --  Y ve a ver cómo demonios resuelves este asunto, empezando por liberar a los Weasley y que todo el mundo lo vea y aun así seguirás estando en muchos problemas.

Evan salió del despacho del ministro con la sensación de tener una varita apuntando directo a su garganta. Lo primero que hizo fue enviar a Kovacevic a sacar a los Weasley, advirtiéndole la mayor discreción, ya se encargaría él más tarde de hacerle saber a la dichosa multitud que se había tratado de un malentendido, pero Bill no estaba dispuesto a ceder ni un milímetro de espacio en beneficio de aquel miserable, de modo que se empeñó en sacar a su familia por la puerta principal y no pudiendo impedirlo ya que no eran prisioneros, Kovacevic se vio obligado a dejarlos salir por allí.

Y sin duda el señor Ministro tenía razón, porque si bien pudieron silenciar a El Profeta, no lo consiguieron con El Quisquilloso, en cuya primera plana del día siguiente salió la foto de Evan Turel bajo un maravilloso titular.

Los Errores Garrafales de Evan Turel y su CCP (Cuerpo de Cretinos Peligrosos)

El artículo era un relato pormenorizado de lo sucedido después de la boda de Bill y la encarnizada e injustificada persecución a la que estaban siendo sometidos los miembros de la familia Weasley, así como la inexplicable cacería que se había emprendido en contra del joven y brillante sanador Jason Prewet.

De manera que sí, Evan Turel estaba en muchísimos problemas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario