Después
de un minucioso examen y una comprobación que a Bill en particular le pareció
inútil, ya que Sirius había demostrado tener sus reflejos en buen estado, Jason
se dio por satisfecho.
-
Todo en orden --
dijo volviéndose hacia ellos
-
Si me lo hubieses preguntado, yo te lo
habría podido decir y te habrías ahorrado el trabajo --
bromeó Sirius
-
Debía asegurarme, los efectos del Arco
hasta dónde he podido comprobar, son la pérdida de la sensibilidad y tal como
sospechaba, de la memoria. Sin embargo
-- y miró a Remus --
estoy casi seguro que la memoria ira regresando de forma gradual, así
como lo han hecho sus reflejos y su consciencia. En cuanto a su cordura, no es
mucho lo que puedo hacer, ya estaba así desde antes --
dijo en forma irónica, pero Remus sabía que era su forma de informarle
que Sirius estaba en condiciones de recibir la información que restaba por
dársele -- Ahora debo marcharme --
finalizó
-
Gracias Jason --
dijo Remus -- por todo
-- enfatizó sabiendo a dónde se
dirigía él chico
Como
de costumbre él se limitó a un imperceptible gesto con la cabeza y dándoles la
espalda se marchó.
-
No es muy comunicativo el “niño” --
opinó Sirius
-
Pues te llevabas bastante bien con
él --
le informó Remus -- y te sugiero dejarlo en paz, primero porque
su comunicación suele ser desagradablemente ácida especialmente si se lo
molesta demasiado, y segundo porque su otra forma de comunicación normalmente
termina en perjuicio físico para el que se arriesga.
-
¡Vaya! Estaba en la creencia de que los
sanadores tenían por costumbre reparar y no destruir --
dijo con sorna
-
Aparte de sanador, Jason es Auror --
intervino Bill -- y para tu desgracia, tu contribuiste a su formación,
y déjame agregar aunque eso golpee tu ego, que es uno de los pocos que ha
logrado desarmarte.
-
¡Demonios! -- y
luego miró a Remus -- Recuérdame que en el futuro no vaya por ahí
entrenando muchachitos de mal carácter. Y ahora
-- dijo con una mirada
acusadora -- vas explicarme cómo es que llegaste a tener
una hija, y quién es la infortunada criatura a la que dejaste embarazada.
Remus
y Bill se miraron y se prepararon para una larga noche de explicaciones, pero
especialmente, para enfrentarse al dolor que iban a causarle.
Jason
llegó a la casa de los Granger y fue recibido por la madre de Hermione. Sin
bien era cierto que el chico no era especialmente comunicativo, como dijo
Sirius, no era menos cierto que eso solo sucedía cuando estaba molesto, ya que
en condiciones normales solía ser jovial y encantador. De otro modo, no habría
sido posible que tuviese el éxito que tenía entre las chicas, y aunque como
decía Bill, su humor era ácido, esto se compensaba con su atractivo físico.
La
señora Granger sonrió en cuanto lo vio. Por todo lo anterior, la madre de
Hermione aunque había aprendido a apreciar y a respetar a Remus, no dejaba de
pensar que Jason era mucho más conveniente para su hija. Sin embargo, y aunque
ahora su cariño por el chico se había acrecentado por lo que había hecho por
Hermione y la niña, tanto ella como su
esposo respetaban las decisiones de su hija.
Lo
saludó y lo hizo pasar de inmediato, conduciéndolo hasta la habitación de su
hija. En cuanto Hermione lo vio caminó hacia él mirándolo con ansiedad.
-
¿Qué sucedió?
-
Nada
-- dijo él con tranquilidad --
¿Por qué habría de suceder algo?
Hermione
lo miró con una mezcla de incredulidad y exasperación.
-
¿Nada? Jason envías un patronus diciéndole a Remus que es
urgente que se presente en no sé dónde, y luego él envía otro anunciando que la
reunión ha sido suspendida y pretendes que crea que no sucede nada --
todo esto lo dijo de corrido y casi sin respirar --
¿Crees que soy estúpida?
-
Porque sé que no lo eres, sé también que
estás al tanto de que hay información que no puedo compartir -- y
con esto dio por concluido el tema
Ella
sabía que bajo ninguna circunstancia conseguiría que él le dijera nada. De modo
que se tragó su malestar, mientras lo veía caminar hacia la cuna de la niña.
La
pequeña se había despertado unos segundos antes de que él entrase, de modo que
Jason sonrió y procedió a examinarla de pies a cabeza cómo lo hacía siempre.
Estaba próxima a cumplir su primer mes de vida, y él estaba muy satisfecho con
su desarrollo. Ya había alcanzado el peso y la medida que debía, y lucía en
perfecto estado. Después que concluyó su revisión, jugueteó un momento con ella
y prestó atención a otros detalles que nada tenían que ver con su salud.
Aparentemente Lyra sería una copia bastante fiel de su madre, con excepción del
cabello que evidentemente era del tono claro del de su padre, aunque no se
sabía si sería tan alborotado como el de Hermione. Y los ojos que si no
cambiaban como solía suceder, tenían el mismo color de los de Lupin. Jason se
sintió observado y levanto la cabeza.
-
¿Todo en orden? --
preguntó Hermione
-
Sí, todo en orden. Aunque quería
preguntarte algo desde hace días.
-
¿Qué?
-
¿Está durmiendo correctamente?
-
Pues la verdad, yo diría que duerme en
exceso -- dijo ella
-- Pasa casi todo el día dormida,
solo se despierta a las horas que debe comer y…
-- hizo una ligera pausa y se
quedó pensativa
-
¿Y…?
-- preguntó él al ver que había
dejado la frase inconclusa
-
Nada olvídalo, no tiene importancia.
-
Hermione, primero que duerma casi todo el
día y despierte solo a las horas de comida, es lo normal en los bebés recién
nacidos, pero “todo” es importante
-- dijo enfatizando el
“todo” -- Así que dime eso que no te parece relevante.
-
Es solo que me parece curioso que aparte
de despertar para comer, también lo hace cuando tú apareces, si no fuese tan
absurdo, diría que es como si te sintiera.
Eso
era lo que en principio había originado la pregunta de Jason. Durante los
últimos días de la estadía de Lyra en el Hospital, Jason había notado que sin
importar la hora en que pasase a verla, la bebe estaba despierta, pero antes de
alarmar a Hermione había decidido observarla y ahora que todo parecía marchar
bien había decidido preguntar. Sin embargo, ese razonamiento le parecía
ciertamente del todo absurdo. Miró a Lyra e intentó recuperar su dedo que ella
apretaba con fuerza en su manito.
-
Bueno, en esta ocasión creo que tienes
razón y quizá solo sea casualidad
-- caminó hacia Hermione para
entregarle a la niña -- Ten, por la forma en que intentaba “comerse”
mi dedo, deduzco que tiene hambre
-- le dijo sonriendo
-
Por supuesto que no, cuando llegaste
acababa de dormirse después de haber comido
-- le aseguró ella -- es
imposible que tenga hambre.
-
No, claro que no, se trata de un acto
reflejo, pero como no sabía que ya había comido pensé que tenía hambre
Estuvo
otro rato entretenido con la niña y después de colocarla de nuevo en la cuna,
se marchó asegurándole que aunque todo parecía estar bien, igual volvería al
día siguiente.
Después
de abandonar la casa de Hermione, pasó por el Hospital, chequeó a algunos de
sus pacientes hospitalizados y finalmente se fue a casa. Apenas entró, en lugar del afectuoso y
habitual saldo de su tía, se encontró con una colérica Fleur.
-
¿Dónde está Bill? --
preguntó plantándose frente a él con los brazos en jarras
Jason
se preguntó qué mal le había hecho él al mundo, primero Hermione y ahora Fleur.
-
Trabajando --
contestó en forma cáustica
-
Eso ya lo sé, y lo está haciendo pogque tú lo llamaste
-
Sí yo lo llamé, y no, no puedo decirte
dónde está -- ahora su tono fue decididamente peligroso
Pero
aquella necia criatura no parecía dispuesta a dejarlo pasar, lo que se tradujo
en la ira inmediata de Jason. En otras circunstancias tal vez lo habría
manejado de otra forma pero estaba muerto,
aquel había sido un día especialmente difícil y todo lo que quería era
comer algo e irse a dormir.
Arthur
y Molly tomaron la decisión de intervenir antes de que el carácter de Jason
hiciese explosión.
-
Vamos Fleur, acompáñame --
dijo Arthur colocándole un brazo sobre los hombros a la chica y
sacándola de allí
-
Ven cariño, debes tener hambre --
dijo Molly por su parte agarrando a Jason por un brazo y conduciéndolo
hacia la mesa
-
Espero que Bill esté consciente de la
enorme estupidez que va a cometer
-- dijo el chico con
resentimiento
Aunque
Jason no tenía nada en contra de Fleur, era obvio para todos que no le agradaba
pero Charlie había opinado cuando lo había escuchado hablar de ella, que su
resentimiento obedecía a que la culpaba por perder a su compañero de juerga.
Los
primeros rayos del sol sorprendieron a los tres hombres frente a la lápida de
Anne Marie. Aunque Sirius no recordaba ni siquiera su rostro, todo lo que le
habían contado Bill y Remus le había producido un profundo dolor y había
abierto una herida que estaba seguro no se cerraría nunca. Y aunque jamás se imaginó que podría amar a
ninguna mujer de la forma como se lo habían descrito, estaba seguro que Remus
no le mentiría en algo como eso.
A
pesar de que Jason les había hecho saber que Sirius se encontraba en
condiciones como para ser informado de todo lo acontecido, tanto Remus como
Bill habían decidido no contarle nada acerca de Anthar. Ambos pensaron que en
ese momento nada podía hacer él, y solo le causarían un sufrimiento aun mayor.
Sirius
se encontraba arrodillado a los pies de la tumba, y a pesar de que había hecho
un enorme esfuerzo por recordar aunque solo fuese una pequeña parte de todo lo
que le habían contado, no lo había conseguido. Sin embargo, el dolor persistía
y de una manera extraña sentía que se le escapaba algo.
Remus
había notado que al dolor se había sumado un odio sin medida, que por
experiencia él sabía lo peligroso que podía resultar. Pero también ahora le
preocupaba lo que había dicho Jason acerca de que Sirius iría recuperando la
memoria gradualmente. Eso significaba que tarde o temprano iba a recordar a su
hijo, solo esperaba que lo perdonase por no habérselo dicho en ese momento.
-
Sirius, es hora de irnos -- le
dijo con suavidad, y él se puso de pie sin protestar
-
Te juro que los que nos hicieron esto, lo
van a pagar muy caro -- dijo dejando traslucir en su tono un odio
frío y visceral
Agitó
su varita y de ella brotaron unas flores blancas que suavizando su expresión,
colocó sobre la lápida. Después de esto, giraron sobre sí mismos y se
desaparecieron de nuevo hacia Hogwarts.
-
¡Cuidado!
-- exclamó Bill cuando se
acercaban a las puertas -- Viene Hagrid
Remus
había olvidado por completo que si bien el resto del profesorado no estaba en
el Castillo, tanto Hagrid como Filch, sí. Se ocultaron tras unos árboles y
esperaron a que el hombre pasase. No se movieron hasta que no lo vieron
alejarse en dirección a Hogsmeade.
-
Quizá no sea muy conveniente que
permanezcas aquí ahora -- dijo Remus
-
Puedo volver a Grimauld Place --
acotó Sirius sin mucho ánimo
-
No, después de la muerte de Dumbledore no
creo que sea seguro -- opinó Remus y guardaron silencio por unos
minutos
-
¡Lo tengo! --
exclamó Bill
-
¿Dónde?
-- preguntaron ambos
-
Mi casa.
-
Bill, no podemos presentarnos en La Madriguera así nada más, y no será
sino hasta esta noche cuando…
-
No
-- lo interrumpió Bill -- no
me refería a La Madriguera, me
refería a la casa dónde nos iremos a vivir Fleur y yo.
-
¿Fleur?
-
Es mi prometida, nos casáremos el mes
entrante -- informó Bill
-
¿Estás loco? --
preguntó Sirius
-
¿Por qué? ¿No te parece un buen lugar? Ni
siquiera lo conoces.
-
El lugar seguramente me parecerá
excelente, la locura es que quieras casarte
-- y prorrumpió en una sonora
carcajada que contribuyó en mucho a relajar los ánimos
Remus
puso los ojos en blanco pensando que en definitiva, aquel sujeto no tenía
arreglo.
A las
ocho de la noche, estaban casi todos los miembros de la Orden ya reunidos. La
reunión de aquella noche revestía un carácter de suma importancia para todos,
ya que se trataba de cómo sería extraído Harry de su residencia con la mayor
seguridad posible.
El
último en llegar fue Kingsley y con algo de retraso, pero sus obligaciones al
cuidado del Primer Ministro muggle, no le habían permitido llegar antes. Se
disculpó y la reunión dio inicio.
-
Todos sabemos por qué estamos reunidos
aquí hoy, pero voy a pedirles su atención para tratar otro asunto de la mayor
importancia -- comenzó Remus
Todos
se miraron con expectación, ya que en opinión de muchos, no podía haber nada
más importante que lo que se traían entre manos.
-
Lo que tengo que decirles está
relacionado con Sirius Black.
Ahora
de la expectación pasaron al asombro ¿Qué tenía que ver un hombre que llevaba
muerto más de un año, con lo que les interesaba en ese momento?
-
Hace poco más de un año, tras los sucesos
en el Ministerio… -- y les
narró todo lo sucedido y las decisiones que se habían visto obligados a tomar
dadas las condiciones en las que había quedado Sirius
Las
reacciones fueron de diversa índole, desde la incredulidad, hasta la más
absoluta estupefacción.
-
… y hoy me complace mucho decirles que
gracias a la habilidad y dedicación de Jason, Sirius está completamente
recuperado -- finalizó
Las
expresiones de júbilo no se hicieron esperar, así como las preguntas.
-
¿Cómo está?
-
¿Cuándo podremos verlo?
-
¿Dónde se encuentra? --
todas estas preguntas fueron hechas al mismo tiempo y en forma
atropellada, pero antes de poder responder ninguna…
-
Aquí
-- dijo la voz por todos conocida
Un
pesado y asombrado silencio cayó sobre todos al verlo aparecer entre las
sombras.
-
¡Vaya!
-- dijo él mientras se
acercaba -- Pensé que estarían más contentos de verme
La
primera en reaccionar fue Hermione, que corrió y se lanzó en brazos del hombre,
seguida de Tonks y de Molly.
-
Señorita Granger, me imagino --
dijo él -- ya me dijeron que has estado portándote mal -- le
susurró -- solo espero que estés cuidando adecuadamente
a mi sobrina -- y le permitió alejarse no sin antes propinarle
una palmada en el trasero que solo contribuyó a aumentar su sonrojo
Jason
había seguido con la mirada todos sus movimientos y estaba furioso, mientras
que Remus solo tenía una expresión ligeramente divertida y recordaba con
nostalgia que aquello era algo que Sirius solía hacer con Lily.
Después
de los abrazos, besos y apretones de manos, todo volvió a la calma. Remus
agregó a la explicación que Sirius había perdido una parte de su memoria, pero
que confiaban en que poco a poco iría recuperándola, y que por lo demás se
integraría a sus actividades en la Orden de inmediato.
A
continuación pasaron al punto central de la reunión. Ya con anterioridad habían
discutido y llegado a un acuerdo acerca de lo que se haría con los parientes de
Harry. Hestia Jones y Dedalus Diggle, se habían ofrecido como protectores e
incluso ya estaba decidido y preparado el lugar a donde serían llevados. Arthur
y Kingsley habían ido a visitar a los Dursley y les habían informado no solo
del peligro que corrían y por qué, sino que ellos estaban dispuestos a
prestarles su ayuda y protección. Aquello no había resultado sencillo, pero
finalmente habían aceptado. Pero a Harry solo le dijeron que ese mismo día le
informarían el modo de salir con seguridad de su casa. Y justamente ese punto,
era el que se disponían a discutir ahora.
Después
de casi una hora y varias ideas unas más descabelladas que otras, la voz de
Mundungus que parecía acabar de despertar de una de sus acostumbradas siestas
durante las reuniones, se dejó escuchar.
-
¿Y qué tal si usan distracciones? --
dijo
-
¿A qué te refieres Dung? --
preguntó Sirius
-
Pues a utilizar Poción Multijugos --
dijo el vagabundo -- que sean varios Harry y así los mortífagos no
sabrán a quien perseguir
Todos
se quedaron en silencio. Algunos pensaban que aquello era una soberana
estupidez, mientras que otros lo estaban considerando, y los menos, lo veían
como algo viable.
-
Me parece una buena idea --
dijo finalmente Moody -- hasta que por fin se le ocurre algo
medianamente aceptable a este…
-
¿Buena idea? --
terció Molly -- A mí me parece una locura.
A
partir de ahí se inició la discusión, pero en última instancia todos quedaron
convencidos. Ahora solo restaba decidir quiénes serían “Harry” y quiénes los
protectores. Después de otra soberbia discusión, especialmente en el caso de
Mundungus que protestó ruidosamente porque él no quería participar, y opinaba
que debían darse por satisfechos con que hubiese aportado la idea, y la férrea
oposición de Jason a que Hermione fuese uno de los “Harry”, el asunto quedó
integrado de la siguiente manera: Hermione, Fleur, los gemelos, Ron y Mundungus, serían los falsos Harry,
mientras que Kingsley, Arthur, Bill, Remus, Tonks, Moody y Hagrid, serían los
protectores.
Tanto
Sirius como Jason, habían protestado con vehemencia por haber sido excluidos
del asunto, pero Remus tenía otros planes para ellos.
-
Necesitaremos otras protecciones -- les
dijo y procedió a designar a los que protegerían las casas que estando
relacionadas con la Orden, podían intentar ser violentadas por los
mortífagos -- Sirius, tú estarás en La Madriguera, es el punto de reunión final y la que intentaran
penetrar a toda costa, ya que no es ningún secreto la relación de los Weasley
con Harry.
Sirius
entendió el razonamiento ya que en la
Madriguera quedaban Molly y Ginny solas, de modo que si tenían que
enfrentarse a un inesperado ataque, podía irles muy mal. Luego Remus miró a
Jason que aún se encontraba ceñudo.
-
Jason a ti voy a pedirte un favor
personal -- le dijo
-- si bien es cierto que la casa
de los Granger no es una de las que estaría en la lista, es allí donde está
nuestra hija.
La
expresión de Jason cambió de forma inmediata y asintió. De este modo quedó todo
dispuesto para sacar a Harry y a su familia, unos días antes de que se
cumpliese el plazo de la mayoría de edad del chico y quedase forzosamente
expuesto.
-
Solo hay una cosa que quiero agregar
-- dijo Hermione cuando ya daban la
reunión por finalizada -- Harry se opondrá a esto y se pondrá muy
difícil.
-
Puede ponerse todo lo difícil que se le
antoje -- gruñó Moody
-- pero no tiene opción.
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