Al filo de la navaja

Al filo de la navaja
Nuestro pasado no determina nuestro futuro, son nuestras decisiones y nuestras acciones las que lo hacen. Así como tampoco somos responsables por lo que nuestros antepasados hayan hecho o pretendido hacer de nosotros, pero sí lo somos de lo que decidamos hacer con ello. El pasado es un hecho, el presente lo construimos segundo a segundo, y el futuro es un lugar incierto que siempre nos mantendrá… Al Filo de la Navaja

miércoles, 10 de diciembre de 2014

Cap. 58 Presentimiento y dolor…



Todos miraban estupefactos la pared lisa donde debía encontrarse la puerta. En un primer momento sus mentes quedaron en blanco, pero el ruido proveniente del exterior los sacó bruscamente de su abstracción.
-         ¡Los tenemos!  --  dijo una voz
-         ¡Que alguien avise a Turel!  --  escucharon otra
-         ¡Pero… tienen al Ministro!  --  advirtió un tercera
-         ¡Daños colaterales!  --  escucharon otra
Bill se había acercado a la pared y tanteaba la superficie.
-         Tiraran la puerta de un momento a otro  --  dijo Grace
-         ¡Lo sé!  --  exclamo Jason  --  Estoy pensando
Grace y Remus estaban igual que Bill tanteando la pared, pero de pronto Bill se detuvo.
-         Es posible que solo esté oculta  --  dijo  --  ¡Háganse para atrás!  --  ellos se apartaron con rapidez, mientras Bill apuntaba su varita  --  ¡CONFESSUS SUM! ¡EXTRAHERE OSTIUM!
Todos vieron con enorme alivio, que la puerta comenzaba a materializarse, pero también escucharon la voz de Turel y una orden sumamente alarmante.
-         ¿Qué están esperando?  ¡Tiren la maldita puerta!
Ya Grace había hecho pasar a las Thomas y fue seguida por los demás. El último en pasar fue Bill y cerraba la puerta justo cuando se escuchaba la explosión de la otra, solo esperaba que la dichosa puerta desapareciera en cuanto fuese cerrada. Grace ya había alcanzado la escalera y subían a tanta velocidad como les era posible, los demás subían casi de espaldas a la espera de poder proteger a las mujeres en caso de que los siguiesen, pero aquel ascenso resultaba no solo incómodo sino peligroso, teniendo en cuenta que la condenada escalera era en forma de caracol. Sin embargo, hasta el momento no habían escuchado nada que les indicara que los estaban siguiendo. Un haz de luz les llegó en el momento que Grace alcanzó la otra puerta y la abrió, pero Bill estuvo a punto de caer cuando la luz lo distrajo y si Sirius no hubiese sujetado su brazo, lo habría hecho. El asunto fue que el pie se le quedó trabado entre dos escalones y al ser arrastrado con la fuerza que lo haló Sirius, fue perfectamente audible cuando el hueso se partió.
-         ¡Maldición!  --  exclamó Bill
A pesar de la incomodidad, Jason se metió entre Sirius y el pasamanos, y ayudó a extraer el pie de su primo con tanto cuidado como le fue posible, y entre ambos lo ayudaron a salvar el tramo que les faltaba mientras Remus les alumbraba el camino.
Una vez en el pasillo, miraron en ambas direcciones y tomaron la decisión de desaparecer desde allí mismo.

***************************************

Cuando los agentes del CCP tiraron la puerta y entraron, no podían creerlo. Buscaron inútilmente donde no había nada que buscar.
-         ¡Maldita sea!  --  vociferó Evan  --  ¡Nadie puede desaparecerse desde aquí! ¡Encuentren a ese desgraciado! ¡Lo quiero vivo o muerto, pero tráiganmelo, o serán sus cabezas a cambio!
Sin embargo, y a pesar de que las chimeneas habían sido selladas desde el momento en el que se había dado la alarma cuando Remus fue reconocido, y aunque hicieron un exhaustivo registro de cada rincón del Ministerio y no se le permitió a nadie entrar ni salir en casi todo el día, por supuesto nada encontraron.
El ministro había sido reanimado pero su aporte fue nulo. De modo que al final del día, Evan Turel estaba a punto de infarto, y ciertamente a partir de ese día, comenzó a preocuparse seriamente por su vida.
Lo que había dicho Jason era cierto, se había convertido en su peor pesadilla, él y los otros tres desgraciados. No era posible que cuatro mal nacidos, tuviesen en jaque a todo un ejército de hombres bien entrenados, y siendo que Evan Turel no se destacaba por su brillantez, comenzó a concebir locas ideas acerca de Jason, porque en su obsesivo pensamiento, no era natural ni siquiera que estuviese vivo, él mismo lo había visto “morir”, así como no era posible que se escapara una y otra vez no solo entorpeciendo sus planes, sino dejándolo en ridículo. De modo que sí, Jason Prewet era una auténtica pesadilla.

**************************************

En cuanto llegaron a Inverness, Grace había comenzado a caminar hacia la casa, pero siendo que Bill no podía, Jason los detuvo a todos.
-         Déjenme atender a Bill primero, si mi tía lo ve llegar así va a matarme  --  dijo
-         Sí serás  --  dijo Grace  --  Nos arrastras a todos a una misión suicida, ¿y ahora te preocupas por lo que te dirá tu tía por una pierna rota?
Pero Jason no estaba prestándole atención, en tanto que Sirius sí.
-         Para empezar nadie te pidió ir niña. Tú sola te invitaste a la “fiesta”. De modo que difícilmente puedes acusar a nadie de haberte obligado a nada, así que si quieres reclamarle algo a alguien, mírate al espejo.
-         No me estoy quejando necio, solo expreso mi opinión acerca de la ridiculez de…
-         Opinión que nadie te ha pedido, por cierto
-         ¡Ya cállense los dos!  --  exclamó Bill que estaba sufriendo un dolor brutal y aquella discusión no ayudaba en nada
Tenía una doble fractura y el hueso había desgarrado la piel, de modo que tenía una herida sangrante que Jason intentaba reparar haciendo caso omiso de la discusión de los otros dos. Demoró aproximadamente media hora en resolver el asunto, pero quedó en perfecto estado. 
Cuando entraron a la casa, Arthur estaba paseándose de un lado a otro, y mientras que Ted hacía lo posible por tranquilizarlo, los gemelos simulaban jugar una partida de ajedrez a la que no prestaban ninguna atención.
-         ¡Por las Barbas de Merlín!  --  exclamó Arthur al verlos entrar  --  ¿Dónde diablos…
Calló al ver a las acompañantes de ellos y los interrogó con la mirada.
-         Hola tío  --  saludó Jason con la mayor naturalidad  --  ellas son la señora y las señoritas Thomas.
-         ¿Thomas?  --  preguntaron los cuatro
Las mujeres aún tenían cara de susto y Jason dedujo que estaban cercanas al estado de shock y no era para menos. De modo que se volvió a los demás.
-         Encárguense, yo voy a ocuparme de ellas  --  les dijo y abandonó el salón en compañía de las mujeres

Kingsley se presentó al día siguiente y aunque inicialmente estaba muy molesto, luego de desahogarse insultándolos en todos los tonos, reconoció que habían hecho un trabajo impecable y sin bajas que lamentar. Les contó además que Turel estaba hecho un basilisco y jurando matar a Jason así fuese lo último que hiciera en su vida. Les informó además, que gracias a su osada incursión del día anterior, habían pasado de la categoría de solicitados, a la de “Indeseables” colocándose así en el mismo estatus que Harry, Ron y Hermione. En este punto, los gemelos y Ginny hicieron mucho escándalo aplaudiendo y gritando a más no poder.
-         ¡Niños!  --  los silenció Molly  --  Esto no es una broma ¿No se dan cuenta que quieren matarlos a todos?
-         Mamá, mientras más los persigan, es porque mejores personas son  --  dijo Ginny
-         Lo cierto es que aunque Turel monta en cólera cada vez que escucha el nombre de cualquiera de ustedes  --  les dijo  --  para los viejos Aurores, y para aquellos que aún conservan el buen juicio, se han convertido en leyenda.
Kingsley se marchó junto con Bill y Fleur, y Jason se dirigió a las escaleras para ir a ver a Lyra, pero se tropezó con Dánaee. Su intención era seguir de largo, pero con aquella mujer eso era imposible.
-         Eres arrogante, vanidoso y patán  --  le dijo  --  pero algún día te voy a ver pagar por todo ello.
-         ¿Algo más? 
-         Sí, te odio
En este punto Jason elevó una ceja y sonrió acercándose a ella, y la chica automáticamente retrocedió
-         Todo lo anterior estaba muy bien, pero no tienes necesidad de mentir, porque tú y yo sabemos que estás muy lejos de odiarme
-         ¡Cretino!
-         Por cierto, lamento no haber podido hacerte el favor que me pediste, imagino que estás decepcionada pero aún tengo cosas por hacer y me habría resultado sumamente inconveniente morir en este momento  --  le dio la espalda y se alejó
Con aquel comentario, solo se ganó que ella intensificara la ira en su mirada, pero él se limitó a sonreír y siguió hacia la habitación de Remus.

Varios días después, Jason estaba en el salón viendo como Sirius hacía de las suyas con Lyra, cuando entraron Remus, Kingsley y los gemelos.
-         ¿Cómo fue?  --  les preguntó
-         Todo bien  --  dijo Remus 
-         Por cierto primo  --  dijo Fred  --  ¿Das tu consentimiento para que la próxima transmisión se haga desde acá?
-         No hay problema
Kingsley se despidió y Remus recuperó a su hija, para enorme decepción de ella que empezó a llorar en forma escandalosa.
-         Si  --  decía entre sollozos y luego miró a Jason  --  Jey
-         Quédate donde estás  --  le dijo Remus cuando lo vio ponerse de pie  --  no vas a dársela de nuevo a ese inconsciente
Pero en primer lugar, a Jason nadie le daba órdenes, y en segundo, Lyra agudizó su llanto extendiendo los brazos hacia el chico. De modo que él se acercó, pero como tampoco era estúpido y sabía que Remus tenía todo el derecho del mundo a oponerse, se decidió por un método menos problemático.
-         No, no voy a dársela al inconsciente, solo me la llevaré y le leeré un rato
Y como la niña seguía llorando a todo pulmón, Remus claudicó entregándosela.
-         ¿Sabes algo Lunático?  --  preguntó Sirius cuando Jason había salido con Lyra 
-         ¡Déjame en paz Sirius! Al menos él no la pondrá a volar por toda la casa.
Y en efecto, Jason se fue con ella al estudio y empezó a leerle un cuento hasta que la niña se quedó dormida en su regazo. Él cerró el libro y se quedó mirándola, pero mientras lo hacía, de pronto sintió una opresión en el pecho y de forma automática se llevó la mano al colgante. Después de unos minutos, subió a Lyra a la habitación pero volvió a bajar y se encontró a Sirius.
-         ¿Qué te pasa?
-         Nada  --  le contestó y esquivándolo siguió bajando
Pero Sirius no se daba fácilmente por vencido, de modo que lo siguió.
-         Puedes mentirme si quieres niño, pero algo te sucede, y aléjate de allí  --  le dijo cuando vio que se acercaba a la licorera  --  deberías recordar lo que estuviste a punto de hacer la última vez que…
-         Está en peligro  --  dijo de pronto interrumpiéndolo
-         ¿Qué?
-         Ella está en peligro  --  repitió
-         A ver niño, vamos con calma, cuando dices “ella” asumo que hablas de Hermione, pero si está o no en peligro, es algo que ciertamente no puedes…
-         ¡Maldición Black!  --  exclamó volviéndose a él  --  ¡Te digo que está en peligro, y es algo de lo que estoy tan seguro, como de que te estoy viendo a ti en este momento!
-         De acuerdo  --  dijo Sirius al verlo tan alterado  --   pero suponiendo que fuese así, nada podemos hacer
-         ¡Lo sé! ¿Por qué crees que me siento así?
-         Pero bebiendo no vas a resolverlo, tienes que calmarte.
Sin embargo, aquello era más fácil decirlo que lograrlo, porque se quedaron en el estudio y en un momento determinado, Sirius casi tuvo la certeza de que Jason iba a ponerse enfermo, porque su sufrimiento era tan genuino como si estuviera experimentado un dolor físico. No obstante, las horas pasaron y aunque Jason no había bebido ni una sola gota de alcohol, estaba en unas condiciones muy similares a cómo habría estado de haberlo hecho. Tenía los ojos enrojecidos, profundas ojeras y un terrible dolor de cabeza. De modo que Sirius se las arregló para convencerlo de que subiese y tratara de descansar un poco. No tenía idea en ese momento, de lo que estaba a punto de suceder.

************************************

Bill despertó sobresaltado y prácticamente se tiró de la cama, enseguida Fleur despertó también.
-         Quédate aquí  --  le dijo Bill
Cogió un abrigo y se lo echó encima de los hombros, empuñó su varita y se lanzó escaleras abajo. Su sorpresa no pudo haber sido mayor al ver al señor Ollivander, a Luna y un chico en compañía de un elfo, en su jardín. La presencia del elfo, explicaba el que personas a las que no había incluido en el encantamiento, hubiesen podido ingresar a su propiedad, pero no explicaba cómo o por qué, el elfo había decidido traerlas aquí.
-         ¿Bill?  --  dijo Luna
-         ¿Qué sucedió?  --  preguntó el a su vez
Pero en ese momento el señor Ollivander se tambaleó y Bill corrió a socorrerlo. Mientras que el elfo decía que debía volver por los demás. Bill quería preguntar, pero primero debía atender a Ollivander. Entre él y el chico lo metieron a la casa.
-         ¡Fleur!  --  llamó Bill, pero ella ya estaba al pie de la escalera  --  Ayúdame por favor, no sé qué tiene, pero…
-         Está muy débil  --  dijo Luna  --  lleva meses encerrado y siendo torturado.
-         Luna  --  y Bill se acercó a ella  --  Necesito que me respondas algunas preguntas  --  y la chica asintió  --  ¿Qué sucedió? ¿Quién es él?  --  dijo señalando a Dean  -- ¿Y por qué ese elfo los trajo acá?
-         Vinimos aquí porque Harry le ordenó a Dobby que nos sacará de donde estábamos, y Ron dijo que nos trajeran tu casa.
Fleur dio un grito y Bill abrió mucho los ojos. ¿Harry? ¿Ron? ¿Qué significaba aquello? Bill trató de tranquilizarse e intentar de nuevo.
-         ¿Luna, dónde estaban?
-         En la Mansión Malfoy
-         En la…  --  se interrumpió y miró a Dean  --  Tú eres…
-         Dean Thomas  --  dijo el chico
-         ¿Y has estado allí desde que te atraparon?
Dean lo miró con expresión de extrañeza, pero luego le contestó.
-         Me atraparon esta noche  --  le dijo  --  y…
-         No puede ser, Ted nos dijo que te habían atrapado hace semanas.
-         ¿Ted está vivo?
Aquello estaba volviéndose complicado, tenían información cruzada, pero eso podía esperar pensó Bill, ahora necesitaba que le aclararan el asunto de su hermano. De modo que volvió a preguntar.
-         Entiendo que Ron estaba allí también ¿no?
-         Sí  --  contestó Dean  --  Los atraparon esta noche también, y nos llevaron a todos a la Mansión Malfoy. Estaban considerando en llamar a quien-tú-sabes, pero luego decidieron llevarnos allá.
-         ¿Y cómo es que… es decir…  --  intentaba ordenar sus pensamientos mientras hablaba  --  ¿De dónde salió elfo?
-         No lo sé, pero de pronto apareció y le dijo a Harry que había ido a rescatarlo, pero Harry le dijo que primero nos trajera a nosotros.
-         ¿Y por qué no vinieron con ustedes?  --  se extrañó Bill
-         No podían dejar a Hermione  --  dijo Luna 
-         ¿Y por qué habrían de dejarla?
Bill estaba perfectamente consciente que el elfo habría podido sacarlos a todos.
-         Porque no estaba con nosotros  --  dijo Dean  --  la tenían arriba y…
-         ¿Y qué?  --  preguntó Bill con desesperación
-         La estaban torturando  --  informó Luna
Fleur había dejado de atender a Ollivander y tenía expresión de horror, mientras que Bill pensaba apresuradamente el mejor modo de proceder, cuando sintió que alguien más llegaba. Salieron corriendo y vieron a Ron que traía a Hermione, pero…
-         ¡Bill ayúdame!  --  gritó Ron
Bill corrió hacia ellos y cuando llegó, un frío helado lo recorrió al ver el estado en el que se encontraba Hermione. Lo ayudó a meterla a la casa, pero apenas habían entrado cuando sintieron los gritos de Harry.
-         … ¡Ayuda!  --  estaba gritando
-         Quédate con Hermione  --  le dijo a Ron, mientras Fleur, Dean y Luna corrían junto a él
Cuando llegaron vieron a Harry arrodillado junto al cuerpo ensangrentado del pequeño elfo, quien miraba sin ver a las estrellas.
-         Hermione  --  dijo de pronto Harry
-         Ron la ha llevado dentro  --  le dijo Bill
Pero Harry pareció abstraerse después de eso, y mientras le extraía la filosa hoja de acero que Dobby  tenía en el pecho y se quitaba su chaqueta para cubrirlo, él y Fleur discutían qué hacer.
-         Creo que debeguías avisag a Guemus  --  dijo ella
-         Primero vuelve a la casa y ve cómo está, después decidiremos.
Fleur hizo lo que Bill le pidió y él trató de hablar con Harry pero fue inútil. Después de un rato fue que pareció recuperar la capacidad de hablar.
-         Quiero hacerlo como es debido  --  fueron sus primeras palabras  --  ¿Tienes una pala?
Bill le proporcionó lo que le pedía, y le indicó dónde podía cavar la tumba, pero entendiendo que quería estar solo, volvió a la casa.
-         Está muy mal  --  le dijo Fleur
-         Tenemos que traer a Jason  --  dijo Ron con urgencia
-         ¿Y Griphook?  --  preguntó Bill que había reconocido al duende
-         Puedo con eso  --  le respondió Fleur
-         De acuerdo, iré por Remus y por Jason
Dicho esto salió de nuevo, pero pensó que no podía presentarse a esa hora sin causar una gran conmoción. De modo que decidió enviar un patronus primero, y pensando en lo que tenía que decir, juzgó más conveniente enviárselo a Sirius. Luego de esto, desapareció en la oscuridad.

*************************************

Después que Sirius dejó a Jason en su habitación, decidió que él sí necesitaba un trago, de manera que bajó de nuevo y luego de servirse, se sentó en el sillón. Estaba mirando el fuego de la chimenea y preguntándose qué había sido todo aquello, cuando lo sorprendió la figura plateada.
-         ¡Sirius despierta! Voy para allá y es urgente.
Sirius se levantó de golpe y dejando la copa que ni siquiera había probado sobre la mesa, corrió hacia la puerta, cuando llegó a ella, efectivamente vio a Bill que caminaba hacia la entrada.
-         ¿Qué sucede? ¿Fleur está bien?
-         No tengo tenemos tiempo para muchas explicaciones, así que atiéndeme  --  le dijo  --  hace un momento aparecieron en casa los chicos. Harry y Ron están bien, pero Hermione no. Tengo que decírselo a Remus, y necesitamos a Jason.
Sirius clasificó la información con rapidez, y tomó una decisión.
-         Yo se lo diré a Lunático, tú encárgate del niño, está despierto  --  le dijo mientras subían las escaleras  --  hasta hace un momento estuvimos en el estudio, y Bill  --  dijo deteniéndose  --  estaba aterrorizado porque aseguraba de la manera más enfática que Hermione estaba en peligro. No puedo entenderlo, pero de alguna forma él lo sabía.
Aunque Bill tampoco, asintió y llegados arriba, Sirius se fue a la habitación de Remus, y él a la de su primo. Jason había tomado el baño que Sirius le había sugerido, y al salir miró la cama seguro de que no podría dormir, de modo que se sentó y así estaba cuando Bill entró en su habitación. En cuanto lo vio, abrió desmesuradamente los ojos y a su memoria acudieron las palabras de Bill: “… si llegan a necesitar ayuda, o un lugar a dónde ir, ya Ron sabe que puede ir a casa”  Se puso de pie y Bill leyó claramente la pregunta en sus enrojecidos ojos.
-         Hermione…
-         Está en casa, pero… está mal
Sin embargo, ya Jason estaba vistiéndose a toda prisa e intentaba expulsar de su mente las terribles imágenes que lo habían estado torturando desde hacía horas.
Por su parte, Sirius entró y  acercándose a la cama, sacudió el hombro de su amigo.
-         ¡Hey!  --  lo llamó
Remus abrió a los ojos y se sentó de golpe.
-         ¿Qué sucede?
-         Tenemos que salir  --  le dijo con cuidado  --  Bill ha venido a buscarnos porque los chicos están en Shell Cottage
Mientras Sirius hablaba él había salido de la cama, pero lo miró en cuanto dijo lo último.
-         Sirius…
-         Debes darte prisa Lunático, Hermione está herida
Remus se quedó momentáneamente paralizado, pero enseguida reaccionó y comenzó a vestirse a toda velocidad. Unos minutos después salían de la habitación, pero Remus pareció recordar algo.
-         Lyra
-         Descuida, le diremos a Miles
En ese momento salían Jason y Bill y bajaron todos. Miles venía hacia las escaleras, porque Sirius había pulsado el timbre mientras Remus se vestía.
-         Milord  --  dijo al ver Jason, pero él no estaba en condiciones de nada que no fuese irse de inmediato
-         Miles por favor, que Annie se encargue de la niña, no sabemos cuánto vamos a tardar  --  le dijo Sirius
-         Muy bien señor  --  dijo el hombre

-         Gracias  --  y corrió tras los demás que ya iban a mitad de camino hacia el punto de desaparición

No hay comentarios:

Publicar un comentario